La nueva planta de fabricación de vacunas de Tres Cantos en Madrid, cuenta con una capacidad de producción de hasta 100 millones de dosis vacunales
- El acto ha contado con la presencia de Pedro Duque, ministro de Ciencia e Innovación.
- La compañía, especializada en productos biotecnológicos, amplía su capacidad de producción y se adentra en el desarrollo de productos para la salud humana.
- CrisBio®, la tecnología exclusiva de Algenex, permitirá la producción de vacunas de forma
eficiente, rápida y económica.
Madrid, 24 de septiembre de 2020.- La compañía biotecnológica española Algenex ha inaugurado hoy, en Tres Cantos, su nueva planta de fabricación dedicada al desarrollo de vacunas y otros productos biotecnológicos, a la que ha acudido el ministro de Ciencia e Innovación, Pedro Duque. También ha contado con la presencia del vicepresidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio Aguado, y del alcalde de Tres Cantos, Jesús Moreno, además de destacados representantes del sector biotecnológico español.
Con la nueva planta de producción, Algenex tiene la capacidad inicial de fabricar 50 millones de dosis vacunales que podría llegar a los 100 millones en un corto espacio de tiempo y con una inversión mínima. El sistema de producción de Algenex se puede aplicar a cualquier vacuna basada en proteínas. En el caso de la COVID-19 suponen aproximadamente el 40% de las candidatas actualmente en desarrollo.
Las nuevas instalaciones permitirán a la compañía consolidarse en el ámbito de las vacunas
veterinarias, así como avanzar en el uso de su tecnología exclusiva CrisBio® para el desarrollo de productos específicos para la salud humana, tales como vacunas de gripe o un candidato a vacuna contra el SARS-CoV-2 en el que ya están trabajando, así como antígenos destinados a los tests diagnósticos para la detección de anticuerpos, entre otros.
En el acto inaugural, el ministro de Ciencia e Innovación, Pedro Duque, ha destacado que Algenex surge en 2005 de una spin-off de un organismo público de investigación, el Instituto Nacional de Investigación y Tecnología Agraria y Alimentaria, y desde el inicio ha contado con financiación del CDTI, por lo que es un claro caso de éxito del sistema español de ciencia, tecnología e innovación. El ministro también ha resaltado el papel central de la investigación y la innovación para acabar con esta pandemia y para asegurar la recuperación sostenible y el futuro de las siguientes generaciones.
Por su parte, la directora general de Algenex, Claudia Jiménez, ha explicado que: “En solo 5 meses y con una inversión de menos de 2 millones de euros, hemos puesto en marcha una planta con capacidad de aportar soluciones a la industria farmacéutica en términos de escalabilidad, versatilidad, tiempo de desarrollo y costes reducidos que permite globalizar el uso de productos biotecnológicos”.
Con resultados demostrados de eficiencia productiva y eficacia protectiva en una vacuna frente a una variante de influenza aviar, una enfermedad zoonótica que podría volverse pandémica, Claudia Jiménez ha puesto a disposición de las autoridades sanitarias –durante el acto de inauguración– la capacidad de Algenex, su tecnología y el compromiso para luchar contra las enfermedades infecciosas, incluida la pandemia de la COVID-19 que actualmente estamos viviendo.
Escalabilidad casi ilimitada
Algenex es una compañía 100% española especializada en la fabricación de vacunas y otros productos biotecnológicos a partir del uso de crisálidas que actúan como biorreactores naturales. Se trata de una tecnología simple, eficiente y extremadamente segura, que permite un desarrollo rápido y un escalado industrial productivo lineal y prácticamente ilimitado, a costes muy inferiores a los empleados en los sistemas de fabricación tradicional. Dependiendo del antígeno y de la dosis de inmunización establecida, una crisálida infectada puede producir entre 10 y 80 dosis vacunales o suficiente antígeno para producir miles de kits diagnósticos.
Para el doctor José Escribano, director científico y fundador de Algenex, “la compañía ha recorrido un largo camino para optimizar la fabricación de productos biotecnológicos utilizando un organismo vivo y desarrollar todos los procedimientos industriales que hacen que CrisBio® pueda significar un antes y un después en la producción de vacunas, moléculas terapéuticas o reactivos diagnósticos”.
El nuevo edificio consta de cerca de 900 metros cuadrados, la mayor parte dedicada al laboratorio de biología molecular, la producción de crisálidas y a la obtención mediante procesos robotizados de las diferentes moléculas. “La nueva planta cuenta con todos los elementos que nuestros científicos y técnicos necesitan para el desarrollo y la innovación, en un ambiente donde prima la tecnología y la creatividad, tal y como corresponde a una empresa como Algenex. Es difícil imaginar una plataforma más versátil, simple y económica de producir productos biológicos complejos basados en proteínas”, añade José Escribano.
Tecnología disruptiva y patentada
CrisBio® es una tecnología disruptiva y patentada diseñada para producir productos biotecnológicos basados en proteínas recombinantes. Para ello utiliza las crisálidas de un lepidóptero, la trichoplusia ni, que actúa como un biorreactor natural tras ser inoculado, de forma robotizada, con vectores virales modificados genéticamente. El virus coloniza las células vivas del insecto y éstas comienzan a producir la proteína deseada sin necesidad de medios artificiales ni manipulación alguna.
Algenex cuenta con una amplia experiencia en el desarrollo de vacunas. La primera vacuna producida en CrisBio® está actualmente en proceso de validación por la Agencia Europea del Medicamento (EMA, por sus siglas en inglés). Asimismo, cuenta con otras vacunas en desarrollo contra enfermedades víricas para varias especies en distintas fases de desarrollo, con capacidad de llegar al mercado en los próximos años.
Hasta ahora, Algenex había utilizado esta tecnología para la fabricación de productos veterinarios. En la actualidad, están trabajando en el desarrollo de un prototipo de vacuna contra el SARS-CoV-2 y de prueba diagnóstica para la detección de anticuerpos en pacientes para los que han recibido una subvención del CDTI de 470.000 euros.